Parque Nacional Cajas

¿Cómo llegar por cuenta propia?

Es muy sencillo por cuenta propia. En autostop o desde la Terminal Terrestre de autobuses de Cuenca coger un autobús que por 2 $/persona, te dejará en el Centro de Interpretación La Toreadora en el Parque Nacional El Cajas.

El Parque Nacional El Cajas tiene diferentes entradas, pero la más famosa es esta y queda justo al lado de la laguna que lleva el mismo nombre.

La entrada es gratuita. Al llegar conviene registrarte con tu nombre y la excursión escogida. En el Centro de Interpretación hay información de las rutas y preguntando al guarda forestal, os puede dar información de la dificultad y tiempos de cada una de ellas.

Más información en Parque Nacional El Cajas

Para volver a Cuenca se puede volver en el autostop o esperar y parar a los autobuses que vayan en esa dirección.

Foto a foto 

Muy cerca de la ciudad de Cuenca, se encuentra uno de los Parques Nacionales más acuáticos de todo Ecuador. Decimos acuático porque el Parque Nacional El Cajas es un territorio extenso donde hay miles de lagunas repartidas.

Comenzando desde la Laguna Toreadora hay varias rutas a escoger según nuestro estado físico y las ganas que tengamos de andar. Hay que tener en cuenta que las cimas y lagunas de este parque se encuentran a unos 4000 metros de altura.

La excursión escogida fue subir a la cima del Cerro de San Luis  4240 metros. Corta aunque no es de las más fáciles, es la que ofrece mejores vistas de al menos una parte del parque. Para una persona acostumbrada a la montaña puede hacerse sin problemas, pero en caso de lluvia no la recomendamos ya que tiene pasos aéreos en un terreno muy resbaladizo. En las bajadas la tierra se vuelve muy fangosa. Hay tantas rutas por hacer que no merece la pena arriesgarse con esta si el día no es muy propicio.

El día que fuimos hizo frio con algo de niebla. La ruta la hicimos a paso ligero para evitar las lluvias que suelen empezar al mediodía y evitar así también la niebla. Encaramos la subida sin mayores dificultades, bordeando algunas lagunas y encarando la ladera del Cerro con algún paso en el que había que utilizar las manos. El día anterior había llovido y aunque la tierra estaba relativamente seca había que andar con precaución. Las vistas des de lo alto son excelentes.

Des del punto más alto se prosigue por una arista, donde en alguna ocasión uno se plantea si es el camino correcto. Al ser el único sendero, hay que confiar, y rápidamente se encuentra el camino de bajada, en el que hay que tener cuidado de no resbalarse pues la pendiente es un poco pronunciada. Rápidamente se llega a La Toreadora.

Aunque la extensión del parque es enorme y por esta zona solo se visita una pequeña parte, no hay duda que es un lugar espectacular que vale la pena visitar, y dedicarle al menos un día.