Lo que nos trajo a ésta ciudad fue su mayor atractivo cultural. Atrás quedan los tiempos de los emperadores, de los grandes palacios y zonas exclusivas solo accesibles a la realeza. Pero pese a que el paso del tiempo, la guerra y los desastres naturales han hecho mella en lo que en su día fue la ciudad imperial, aún a día de hoy uno puede hacerse una idea de lo que fue en aquellos tiempos.
Más allá de las murallas, hay una ciudad grande y viva, aunque con poco interés turístico.
Ajena a lo que ocurre dentro de las murallas, Hué, tiene un buen paseo al lado del río, universidades y negocios al más puro estilo occidental y local.
Entramos por el Este a la ciudadela, una gran cantidad de negocios se reparten por las calles y cada una de éstas se especializa en algo. Recorrimos las calles hasta dar con la puerta Norte, y no pudiendo entrar por aquí, bordeamos la muralla hasta la puerta principal, la única abierta a los visitantes.
A nuestras espaldas la Flag Tower, una imponente bandera del país ondea para dejar claro quien mandaba aquí.
De lo que fue la ciudad no quedan más que algunas construcciones, pero una descuidada maqueta y un instructivo vídeo ayuda a imaginarse la magnitud del complejo. Parte de lo que queda en pie ha sido restaurado y es bonito de ver. El resto de edificios están siendo reconstruidos, pero lo que vendría siendo la parte más importante, la residencia del emperador, está en ruinas.
En los alrededores de Hué también ofrece varios atractivos, un paseo en barca por el río, la pagoda de Thien Mu, las tumbas imperiales, pero nosotros no los visitamos.
Preferimos perdernos por las calles de la ciudad en busca de la normalidad, y encontramos los rincones donde la gente pasa sus ratos libres.
8 comentarios
Hué hué hué hué. Hué hué ????????????????
No han salido los dibujitos musicales. Muy chulas las fotos. Una besote gordo, gordo.
Hola!
Muuuuchas gracias! Dos besotes gordos para todos!!!
jo-der que patio de recreo se gastan no?? Impresionante.
Que distancia aprox. tiene este "complejo hotelero" de la época???
Hola Javi,
No está mal. No tenemos el dato exacto, pero había campo para correr. Dentro residían el Emperador, su madre, las concubinas y los hijos …y el séquito de trabajadores. No hay mucha diferencia a las residencias de algunos altos cargos de hoy en día tampoco… 😉
Un abrazo
Alberto & Sonia
Afaitat
Que fots una pinta hipster…
Hey Albert!
Doncs sí, de tant en tant vaig al barber que em passi la máquina, pero a vegades m’oblido 😉
Albert & Sonia